Retales de Historia

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jueves, 9 de agosto de 2012

El Monte Rushmore

Todos hemos visto en alguna ocasión los rostros de cuatro hombres tallados en una montaña de granito: son unas esculturas de dimensiones colosales realizadas en una de las laderas del Monte Rushmore, y se realizaron con la intención de fomentar el turismo en la región de Black Hills, en Dakota del Sur (medio oeste de los Estados Unidos).

Monte Rushmore con parte de las piedras procedentes de su tallado.

La idea de construir esculturas de algún personaje de la historia norteamericana parece que la tuvo el historiador Doane Robinson en 1923. Pero fue Gutzon Borglum, escultor estadounidense de origen danés, quien eligió el lugar y el tema: en vez de las “Agujas” (muy delgadas) el Monte Rushmore, y en lugar de Buffalo Bill, los rostros de cuatro presidentes de los Estados Unidos, que aportaron valores a la sociedad norteamericana. De izquierda a derecha son: George Washington (primer presidente de los Estados Unidos), Thomas Jefferson (autor de la Declaración de Independencia y tercer presidente de Estados Unidos), Theodore Roosevelt (vigésimo sexto presidente de Estados Unidos y Premio Nobel de la Paz en 1906 por su papel de árbitro en la guerra ruso-japonesa) y Abraham Lincoln (decimosexto presidente de Estados Unidos, introdujo medidas que llevaron a la abolición de la esclavitud en 1863).

Monte Rushmore antes de ser esculpido.

Maqueta original 1:12

El Monte Rushmore (de 1.745 metros de altura) fue el lugar elegido porque, debido a su orientación al sureste, dispondría de iluminación gran parte del día. También influyó el granito de grano fino que había en el monte, a pesar de lo cual fue necesario desbastar una gran superficie para poder trabajar con el mejor material. Los trabajos empezaron el 4 de octubre de 1927 y duraron catorce años. En cuanto a las medidas de los presidentes hay que decir que cada busto alcanza una altura de 18 metros, cada nariz mide una media de 6 metros (la de Washington es la más larga), cada ojo 3,4 metros del lagrimal al ángulo exterior y hay 5,5 metros entre las comisuras de los labios. En cada ojo hay una columna de granito de 56 centímetros de largo, lo que produce el efecto de brillo en los ojos cada vez que el sol cae sobre ellos. Entre el punto esculpido más alto (el cabello) y el más bajo (por debajo de los hombros) hay una altura de 40 metros.

Gutzon Borglum.

Borglum con una maqueta del grupo escultórico.

Borglum empezó esculpiendo la cabeza de Washington y la terminó en 1930. Continuó con la de Jefferson: se empezó a la izquierda de la anterior (según las vemos nosotros) pero se topó con granito de mala calidad, se destruyó lo que se había hecho de Jefferson y se empezó otra vez con él, pero al otro lado de la primera cabeza. Pero Jefferson siguió dando problemas: su labio superior tenía una veta de feldespato (componente del granito) que no era posible esculpir. El problema se solucionó con una pieza de granito fijada con azufre.
Washington durante su construcción.

Jefferson durante su construcción.

Borglum fallece repentinamente el 6 de marzo de 1941, a la edad de 73 años, poco antes de terminar la colosal obra. Su hijo Lincoln se encargó de dar los toques finales. Intentó que la obra continuara esculpiendo las imágenes hasta la cintura pero la falta de fondos dio por terminada la obra el 31 de diciembre de 1941, veinticuatro días después del bombardeo de Pearl Harbor. Su coste ascendió a más de 900.000 dólares.

Empiezan a aparecer los rasgos de Theodore Roosevelt dentro del grupo escultórico.

Vista aérea de los "presidentes" con la puerta de la cámara secreta detrás de la cabeza de Lincoln.

En el proyecto trabajaron unos 400 hombres, y no se produjo ningún fallecimiento a pesar de tener que descolgarse por las paredes o de trabajar con dinamita. La mayor parte de los trabajadores eran de la región. En todo el tiempo que duraron los trabajos se desecharon 450.000 toneladas de roca, que se quedaron a los pies de los presidentes y que ya forman parte del paisaje (alguno habrá que se lleve una roca de esas como souvenir). 

Y ahora toca hablar de un detalle de esta obra que no es tan conocido. Justo detrás se esconde una “cámara secreta”. La llamada Sala de Actas tendría que medir 25 por 30, y se estaba construyendo para depositar en su interior documentos pertenecientes a la historia de los Estados Unidos. Pero la dureza del material en esta parte del monte y la falta de presupuesto por la entrada en guerra de Estados Unidos dieron al traste con esta parte del proyecto. De todos modos, en 1998, y bajo una cubierta de granito, se puso en el lugar una caja acorazada de titanio con dieciséis paneles de porcelana que contenían, entre otros, la Declaración de Independencia y una biografía de Borglum. En la cubierta de granito hay una inscripción redactada por Borglum que reza así: "....coloquemos allí, tallado en lo alto, lo más cerca del cielo que podamos, las palabras de nuestros líderes, sus rostros, para demostrar la prosperidad qué estos hombres nos dieron. Entonces hagamos un rezo, que estas inscripciones aguanten hasta que solamente el viento y la lluvia los lleve lejos." El acceso a esta parte del monumento está prohibido, pues su ubicación resulta demasiado peligrosa y la gente podría caer al vacío.

Entrada de la cámara secreta.

Cubierta de granito con la inscripción redactada por Borglum.

Incompleto o no, el conjunto escultórico del Monte Rushmore es admirado anualmente, in situ, por dos millones de personas, y por muchas más desde innumerables lugares del mundo.

Washington y Lincoln durante unas tareas de limpieza que tuvo lugar el año 2005.


Puesta de sol en el Monte Rushmore.

5 comentarios:

  1. Es curiosa esta forma de fomentar el turismo. Me parece una prueba más del gusto de los americanos por la megalomanía. Lo que me extraña es que los ecologistas no hayan dicho nunca nada al respecto.

    Saludos.

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    1. Ahora que, lo dices, no he encontrado ninguna alusión a los ecologistas. Sé que también hay una escultura gigante dedicada a Caballo Loco, pero no tengo referencia del tamaño.

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  2. No lo digo por el tamaño, sino por haber destruido un monte. Bueno, también cuando se hace un túnel o una carretera se puede destruir un monte. Mira la que lió Bono, cuando era presidente de Castilla-La Mancha con las Hoces del Cabriel.

    De todas formas, esto del ecologismo me parece que se está pasando de rosca. Ahora les ha dado a muchas empresas por ahorrar en el consumo de papel. Así dicen que no hay que talar tantos árboles. Es sólo un mero pretexto para ahorrar en sus gastos generales, porque esos árboles se han plantado para talarlos y venderlos. Si se dejan de comprar estos árboles, pues sus dueños se limitarán a talarlos y plantar otra cosa.

    Como anécdota, te puedo contar que ayer llamó un oyente a una emisora de radio. No recuerdo si dijo que era de Huelva o de esa provincia. Lo cierto es que dijo que allí están muy concienciados para ahorrar agua y más este año a causa de la sequía. Resulta que el Ayuntamiento privatizó el servicio de suministro de aguas a la ciudad en enero. Pues ahora han recibido una carta de esa Empresa, donde les dicen a los ciudadanos que, como se consume tan poca agua, han tomado la decisión de subir su precio un 10%. Esta visto que, si quieren subir una cosa siempre encuentran un pretexto para hacerlo.

    Saludos.

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  3. Muy buen articulo,muy comodo de leer,me gusta mucho este blogs,FELICIDADESSS.

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